Lo prometido es deuda

Esta entrada es producto de la lectura de Juego de Tronos, una aburrida tarde de estudio, la costumbre de un profesor de mugir durante las clases, y una promesa por mi parte si aprobaba el examen. El caso es que sin más dilación aquí va (a imitación de la historia de la Casa Lannister) la historia de la noble Casa Santandreu:

 

 CASA SANTANDREU

Los Santandreu, bajos y de cabello grasiento, llevan en las venas la sangre de las vacas lecheras asturianas. Aseguran que descienden por línea materna del toro que mató a Manolete. El oro de Villacuerno permitió al cabeza de familia adquirir un puesto fijo como profesor universitario pese a su incompetencia. Su blasón es una vaca marrón sobre campo de grúas. El lema de los Santandreu es: ¡Oye mi mugido!

PEDRO SANTANDREU, señor de Villacuerno, guardián de las vacas, escudo de palets, fue abandonado de pequeño por sus padres y se crió entre una familia de vacas que lo tomaron por un ternero pelao. Esto ocurrió allá por el año 25 d.C, por lo que no posee familia no bovina conocida.

Sus caballeros y vasallos principales:

- El MIERDAVACA, heredero de Villacuerno.

- El SEVILLANO ese que no se enteraba de por qué el profesor mugía y hacía preguntas mientras ponía cara de espanto.

- También se lleva bien con el PROFESOR DE TECNOLOGIA DE FABRICACION Y DE MAQUINAS, pues tienen pinta de coincidir a menudo en el bar para tomarse un vinete y luego al burdel.

- Los célebres hermanos CORREA, a los que se entiende lo mismo que a él cuando hablan.